viernes, 9 de noviembre de 2012

Respira


¿Notas eso? A veces suave como el roce de una pluma. Otras veces sólido como la tierra, cálido como la arena de la playa. En ocasiones frío como el metal, como el hielo cuyo contacto puede llegar a quemarte. Siempre presente, revoloteando a tu alrededor. Juguetón, provocando tu sonrisa, haciéndote cosquillas.

Respira. Inhala profundamente ese aire que quiere estar dentro de ti, acariciando todos tus rincones, llenando de vida cada una de tus células que bailan mecidas por la brisa, transformándolas en lo que desees.

Siente ese susurro que te convierte en agua al tomar contacto contigo. Nota cómo te derrites con su tacto, cómo se combinan las esencias. Ya no hay estado sólido o gaseoso. Todo fluye, dejándose llevar por la corriente, como las mareas; ahora larga y calmada, luego rápida e inquieta; ahora se vacía y en un momento se vuelve a llenar, con fuerza, como una tempestad que lo arrastra todo a su paso. Un maremoto salvaje en el que ya no se distingue dónde empieza un átomo y acaba otro. Todo está unido, fusionado, formando una conexión con el Universo, tan real que eres capaz de acariciarla, olerla y saborearla. Tan efímera que se te escapa entre los dedos para volver a abrazarte desde donde menos lo esperes y comenzar de nuevo el ciclo, formando un nuevo bucle en el que todo es como debe ser y nada escapa de la perfección.

Sonríes. Lo recuerdas todo y sientes escalofríos porque no puedes parar de pensar en ello. No quieres olvidarlo ni por un momento y no deseas más que poder sentirlo todo de nuevo porque es un lugar feliz, donde tus ojos se convierten en estrellas que iluminan incluso el rincón más oscuro.

Todo es real. Disfrútalo sin pensar en nada más. Tú lo mereces ;)

“El amor es la llave que abre las puertas de lo imposible”

viernes, 31 de agosto de 2012

Deportes de riesgo

Hola, pequeñuel@s!

Después de un tiempo prudencial de ocultamiento para prevenir las represalias contra mis últimas entradas (que leyeron 4, incluyéndome a mí), vuelvo a escribir porque sí, porque me apetece, ¡porque yo lo valgo, copón!
Así que, aprovechando el final de las Olimpiadas, voy a retomar mi tono humorístico hablando de los... Chanchanchaaaan... ¡Deportes de riesgo!

Pero no voy a hablar de los clásicos, como el Puenting, el Parkour o, la última moda de selección natural urbana: el Balconing (te queremos, Darwin), sino de esos deportes extremos que todos practicamos en nuestra vida cotidiana. Ejemplos van:

- Las rebajas. ¡Madre del amor hermoso! Intentar aprovechar la bajada de precios de la ropa y el calzado puede ser jugarse la vida. Las doñas, también conocidas como ñoras, esos seres que pueblan las tiendas esperando agazapadas para quitarte el artículo que estás a punto de adquirir al grito de "¡Eso es mío, que yo lo ví antes!", son seres despiadados que no dudarán en cercenarte un miembro con tal de llevarse una ganga. En serio, prefiero cazar caimanes con una pandereta...

- Viajar en transporte público. ¿Competiciones de apnea? ¡Bah! Estar 10 minutos debajo del agua es una minucia comparado con viajar en tranvía/metro/guagua (autobus, para los profanos). La gente puede desprender vaharadas de nauseabundos olores, ya sea a las 10 de la noche como a las 8 de la mañana. A ver, señores, el desodorante y la colonia es algo que se usa para perfumarse ¡DESPUÉS DE HABERSE LAVADO UNO! En serio, entre ese aroma y los meneos del conductor del vehículo en cuestión, echar la papilla puede ser harto sencillo.

- Abrir un envase. Abrefácil... ¬¬ ¡ABREFÁCIL MIS PELOTAS! Estoy seguro de que los fabricantes ponen algún tipo de dispositivo de observación en cada envase para descojonarse de todos nosotros, pobres usuarios crédulos que caemos en sus vacuas promesas. Ya no hay amor fraternal... Si nos abrazáramos más y los abrefáciles funcionaran, estoy seguro que el mundo iría mejor.

- Tener una hipoteca. ¿Hace falta comentar algo?

- Educar a un adolescente. Niños... Cuando son pequeños dices "ay, es que está pa comérselo" y cuando crecen piensas "¿por qué no me lo habré comido?". Los adolescentes son esos bichos que hacen siempre lo contrario de lo que les sugieres y que, sistemáticamente intentan sacarte de quicio, ya sea llegando a las 5 de la madrugada cuando su hora de regreso eran las 12 o llegando al coma etílico o, lo más frecuente, llegando a ambos a la vez. Esta especie ha digievolucionado de forma inversa, es decir, antes eran cojoneros pero es que hoy en día son para matarlos dos o tres veces. Y puede que ahí esté la solución... Exacto, esa que estais pensando. La misma que para los abrefáciles. Más abrazos, más valores, más diálogo y más comprensión, que todos hemos pasado por esa etapa y la gran verdad es que la inmadurez es una enfermedad que se cura con el tiempo. Así que, tiempo al tiempo. Déjalo pasar, que todo pasará. Hay un momento para cada cosa y una cosa para cada momento.

- El ajedrez. Sí, es un gran juego que te obliga a pensar detenidamente cada jugada, a anticiparte a la estrategia del contrario y a estar atento al mínimo despiste para abalanzarte sin piedad sobre tu rival. Si no juegas bien, puedes acabar devorado, pero, si logras superar las defensas de tu oponente, disfrutarás de un gran banquete. Aunque, como en todo juego, ambos contrincantes ganan si la partida es justa.
Entonces, ¿por qué es un deporte de riesgo? Sencillamente, porque puede causar mucha adicción ;)

Y hasta aquí mis divagaciones de hoy. Sed mal@s :)

"Nada hiere como tu boca"

domingo, 15 de julio de 2012

Escondite

Vamos a jugar al escondite. Sólo tú y yo, uno contra uno, mano a mano.

Me daré la vuelta. Corre, escóndete. Mientras tanto, yo contaré. Pero no con números; contaré historias, de principio a fin o de fin a principio. Empezaré por el final, porque los principios son lo más bonito y quiero terminar en ellos. De hecho, éstos son los míos y, si no te gustan, tengo otros.

¿Aún estás aquí? Corre a esconderte, seguro que se te da estupendamente. Pero yo también soy bueno en encontrar. Tengo alguna idea de dónde puedo hallarte; bajo una escalera, escondiendo tus manos... ¡Oh, venga! ¿En serio? No me lo pongas tan fácil, disimulas fatal.
Vamos, seguiré contando. Te daré otra oportunidad. ¡Oh! Blanco, negro, blanco, negro, blanco, negro. Creo que esa tabla enorme tiene sorpresa... ¡Blanco! Ahí estás una vez más. Ahora, alteza, galopa a otro lugar. Me daré otra vez la vuelta, pero esta vez contaré colores.
Tic, tac, tic, tac... ¡Ahí estás de nuevo! Ahora sí que ha sido un reto, pero esos ojitos hipnóticos me atraían demasiado.

Te toca. Ahora me esconderé yo. No te daré pistas, pero me encanta ocultarme entre palabras sin sentido, bajo letras de canciones, tras miradas divertidas, sonrisas, bromas, picas y tréboles.
Me divierto, porque no creo que me encuentres. El aire es muy ligero y mi perfume se te escapa.
Te daré un voto de confianza, pero date prisa o me evaporo.

Si nos encontramos, podremos elegir el premio que queramos, aunque para mí, el juego es la mayor recompensa. Lo siento, hace años que no tomo azúcar y las golosinas no me atraen, aunque son bonitas para contemplar.

Divirtámonos con el juego y conservemos el mejor recuerdo para poder contarlo una y otra vez. Y contando, contando, empezaremos a jugar de nuevo. ¡Corre a esconderte! ;)


"Hay siempre un poco de locura en el amor, pero hay siempre un poco de razón en la locura"

jueves, 28 de junio de 2012

¿Y si...

¿Recuerdas la primera vez que paseamos por aquí? Era noviembre y hacía frío aunque el sol brillaba. Recorrimos todo este parque y nos reímos mientras observábamos cómo se perseguían las ardillas. Es uno de los mejores recuerdos que conservo.
Ha pasado mucho tiempo desde entonces. Hemos visto pasar otro par de otoños, con sus lluvias incluídas y, como dice la canción, es difícil mantener una vela bajo la fría lluvia de noviembre.

Lo teníamos todo planeado. Escaparíamos de nuestra pequeña prisión rodeada de agua para buscar una vasija de oro al otro lado del mundo. Tù lo hiciste primero y, en cuanto pude, me reuní contigo. Una nueva vida, juntos, lejos de todo lo que conocíamos pero en el corazón de todo lo que deseábamos. Nos comeríamos el mundo entre los dos. Bueno, entre los tres. No podíamos dejar atrás a nuestra pequeña. Ella se adaptó muy bien porque estaba junto a nosotros. Lástima que nosotros no nos adaptáramos igual de bien el uno al otro.

Tú terminaste tus estudios, yo conseguí un buen trabajo y, con el paso de los meses empezamos a ser más tú y yo y menos nosotros. Tu energía se evaporó mientras mi apatía aumentaba. Tus palabras cortantes aumentaban mis silencios. Levantaste un alambre de espino que me arañaba cada vez que intentaba acercarme. Las únicas arrugas que se formaban en nuestras sábanas eran debidas a los giros de mi cuerpo al intentar conciliar el sueño. La pequeña dejó de corretear junto a nosotros para pasarse el día durmiendo, acurrucada para resguardarse del frío; ese frío que lo inunda todo a pesar de ser verano.

Entonces apareció ella. No la buscaba, simplemente apareció entre mucha gente. Conectamos enseguida. En cierto modo, me recordaba a ti, a tu forma de ser cuando caí rendido a tus pies. Igual de salvaje pero mucho más centrada; aquí y ahora, sin escapar hacia el futuro más de lo necesario. De repente, mi sonrisa volvió a aflorar. No la que llevo en mis labios, sino la que sale de mi mirada. Así fue como me di cuenta. Hay algo que no está bien; algo que dejó de estar bien hace tiempo a fuerza de la costumbre y el apego.

Sabía que ibas a preguntármelo. No, no ha pasado nada. ¿Que si me gustaría que pasara? No lo sé. Tal vez sí. Pero tengo claro que no quiero que pase mientras tú y yo estamos juntos; por eso he querido venir aquí para hablar contigo.
No, no te empeñes en eso. Esto no ha sucedido por ella, sino por ti y por mí. Ella sólo ha sido la chispa que me ha hecho abrir los ojos y darme cuenta de que ya no soy feliz. No así, no contigo. He pasado una época maravillosa a tu lado, pero ya se acabó. He de seguir mi camino y dejar que construyas el tuyo.
No, no voy a ir detrás de ella. Nunca he ido detrás de nadie y no voy a empezar ahora; me conoces de sobra como para saber eso. Me voy conmigo mismo para aprender a disfrutar de mí. Es mi momento.

Adiós. Sé feliz.


A veces, las cosas suceden cuando menos te lo esperas. A veces, no suceden como a ti te gustaría. A veces, ni siquiera suceden. ¿Y si nada hubiera pasado? ¿Y si todo hubiera sido de esta manera? ¿Y si...

El destino nos da regalos que, a veces, no somos capaces de apreciar hasta que no los miramos con perspectiva. A mí, me regaló tiempo, y el tiempo es un gran tesoro que no hay que malgastar.



"El amor empieza con los ojos y termina con la costumbre"

domingo, 24 de junio de 2012

Me agotas

Me cansas, me quemas, me agotas. Y ¿por qué después de tantas horas aún tengo la sensación de que me estás besando?
Aunque el recuerdo de tu sabor no me desagrada en absoluto, ahora mismo no me apetece recordarte. No tienes derecho a visitarme cuando te venga en gana. No me apeteces y creo que te lo dejé bastante claro.

Después de caminar kilómetros y kilómetros para olvidarte, la manera en la que me marcaste se evaporó de mí como el rocío del amanecer en una mañana soleada. Un amanecer que viene a acariciar cariñosamente a la oscuridad; a darle a la noche un beso de buenas noches.
¡Cómo cambia todo con la luz! Desde los túneles que llegan a la parte de atrás de mi cabeza hasta los pensamientos misteriosos que atraviesan mi razón. Y, al fin y al cabo, sólo busco una cosa, pero nunca la encuentro. Estoy cansado, pero cada vez más activo y con ganas de reir. Todo lo que quiero es llenar ese vacío, pero no me lo ponen fácil.
¡Vaya! Sé que lo lograré, más tarde o más temprano. Ahora lo único que importa es ponerme en marcha para hacerlo efectivo antes de encontrarme con tu amiga.

A ella la conozco mejor que a ti, pero me provoca casi la misma sensación que tú, aunque no es tan molesta cuando se pone pesada. O quizá es que sé manejarla mejor. La costumbre es lo que tiene.
A estas alturas, mi cabeza se asemeja a un huevo frito, muy hecho, metido entre rodajas de pan caliente untado en mantequilla.

Ya está, ya queda menos. Sólo un pequeño detalle y seré todo suyo. Al final siempre me convence; soy débil por mucho que intente resistirme. Me arrancaré los ojos y la abrazaré hasta que decida que quiero alejarme de ella. Ya lo he hecho y creo que estaré tranquilo, pero, entonces, apareces de repente y...

... me cansas, me quemas, me agotas...

Seguro que te crees muy inteligente pero, ¿sabes una cosa? Me juego un beso a que no te has enterado de nada. Absolutamente de nada ;)

"Lo que se ve no es siempre real"

viernes, 4 de mayo de 2012

Juguetes

Hay tres tipos de tiendas de las que te costaría mucho hacerme salir: tiendas de instrumentos musicales, librerías y jugueterías. Cada vez que entro en alguno de estos mágicos lugares es como si me tragara un vórtice y el tiempo se detuviera, ya sea acariciando cuerdas, perdiéndome entre palabras o imaginando todo tipo de escenarios donde muñecos, peluches y robots viven increíbles aventuras.

Desde pequeño me han fascinado los juegos y juguetes. Tenía una gran colección, tanto de juegos de mesa como peluches y figuritas de acción. Aunque me encantaba jugar a juegos de mesa, la mayor parte del tiempo lo pasaba jugando solo con mis muñecos, ya que no siempre había alguien con quien jugar y, a veces, era incluso más divertido y yo lo prefería así porque, de esta forma, evitaba que mis juguetes se rompieran.
Una vez me enseñaron que, si algo se rompe, a veces no se puede arreglar o sustituir, así que tomé nota y siempre cuidé mucho mis juguetes; tanto que mi sobrino heredó muchísimos y aún conservo algún trocito de mi niñez en casa. Qué le vamos a hacer; soy un niño grande (que no un niñato... esos obran de otra forma).

Después de ver "Toy Story" hace poco, reparé en una cosa: en la peli se le da protagonismo y personalidad (con algunas excepciones) a los juguetes con forma humana o animal pero, ¿qué pasa con los demás? Concretamente, se me ocurrieron tres juguetes de mi infancia cuyo trabajo agotaría a cualquiera:
- La peonza o trompo, para los canarioparlantes. Este pobre ser se pasa el día dando vueltas y vueltas sobre sí mismo para no llegar a ninguna parte.
- La pipa o cachimba con pelotita. Imagínate tener a alguien todo el día soplándote el culo para que se te suban las bolas...
- La raqueta con pelota atada por una goma. Este es el más interesante, sin duda. La pobre pelota no puede escapar de ninguna forma de que le aticen. Es más, se podría incluso pensar que es la propia pelota, en un acto de masoquismo extremo, la que va a buscar que la golpeen.

Si yo fuera estos juguetes, dejaría de dar vueltas, no dejaría que nadie me soplara el culo y rompería el elástico que me obliga a darme coscorrones contra lo mismo una y otra vez. Pero claro, yo soy muy rebelde y no soy ningún juguete, así que todo queda en una de esas películas que hacen tanto daño y no son nada productivas; las que yo llamo "y sis". Así que, ¿y si dejamos de jugar e inventar tonterías y nos vamos a descansar?

Buenas noches, pequeñuelos ;)

"Quien no tiene pelo no puede llevar trenza"

martes, 24 de abril de 2012

Facts

¡Hola, personitas y demás gentes!

En vista de la falta de inspiración bloggera que sufró ultimamente, voy a aprovechar la amable invitación de LaWi para hacer este jueguito, que me ha parecido bastante divertido. Eso sí, no voy a etiquetar a 11 personas, más que nada porque no conozco a tantos bloggers, así que invito a todo el que quiera a participar.

Reglas

Cada persona debe publicar 11 cosas acerca de ellos mismo en sus blogs.
Contestar las preguntas que la persona que te etiqueto formuló para ti, has 11 preguntas nuevas.
Elige 11 personas y enlazalas en tu publicación.
Avísales que las has etiquetado!

Facts

- Cuando tenía 12 años, me rompí tres dedos jugando al baloncesto. Estuve todo el verano con un yeso y, desde entonces, mi índice derecho no está recto del todo.

- Tengo 5 guitarras y todas tienen nombre de chica.

- No como pescado ni marisco.

- Cuando era pequeño me acostumbré a dormir con peluches. Desde entonces, suelo dormir con alguno que me haya regalado alguien especial. Los últimos han sido un osito, un toro, un mono y un pingüino.

- Me encantan las culturas orientales, especialmente la china y la japonesa.

- Se me da fatal empaquetar regalos.


- No mato bichitos. Cuando veo alguno molesto, tipo cucaracha o araña, me las apaño para meterlo en algún receptáculo y dejarlo libre fuera de mi entorno.

- No sé montar en bicicleta.


- Salvo determinadas circunstancias, suelo tener las manos muy calientes.


- Suelo mirar directamente a los ojos a las personas con las que hablo.

- Tengo muy buena memoria; una vez, me hicieron pruebas y determinaron que tenía "aprendizaje involuntario", es decir, que puedo retener cosas sin proponérmelo.

Preguntas de LaWi:

- ¿Tienes hermanos?

   Sí, una hermana mayor.

- Un lugar del mundo al que no te gustaría ir:
   En general, me gustaría viajar por todo el mundo, aunque los sitios que no me llaman nada la atención son los países de turismo caribeño, tipo Cuba o los países de Oriente Medio.

- La última canción que se te haya quedado en la cabeza:
   "Caer" del extinto grupo tinerfeño Mendel. La he estado escuchando un montón últimamente y se me ha quedado pegada.

- ¿Cuál es tu color favorito?
   No tengo un color favorito, pero me gustan los tonos entre el verde y el azul.

- ¿Perros o gatos?
   Gatos.

- ¿Época del año favorita?
   Invierno.

- ¿Cuál es la última situación que has vivido y que ha provocado que te enfades?
   Haber cancelado un plan que me apetecía mucho con una amiga para quedar con otra persona y que anulara la cita sin avisarme con tiempo, haciéndonos perder todo el día (y la noche) tanto a mi amiga como a mí.

- ¿Lees algún periódico habitualmente?
   No suelo. Si me entero de alguna noticia que me interese, suelo leerla en varios sitios para contrastar información.

- Un vicio confesable:
   La música.

- Tu serie favorita de televisión:
   Tengo muchas, pero últimamente me quedo con The Big Bang Theory.

- Si pudieras elegir las vistas desde tu habitación... ¿Qué te gustaría que se viera?
  Un bosque de bambú.

Preguntas para quien quiera contestar:

- ¿Cuál sería tu lugar ideal para ir de vacaciones?
- ¿Practicas algún deporte?
- Si pudieras elegir un superpoder, ¿cuál sería?
- ¿Cuál es tu lado favorito de la cama?
- ¿Eres alérgico/a a algo?
- ¿Hay alguna canción que te provoque automáticamente ganas de llorar?
- ¿Cuál era tu programa favorito cuando eras niño/a?
- ¿Qué tipo de ropa interior prefieres?
¿Tienes algún tatuaje o piercing?
- ¿Te gusta el picante?
- ¿Qué número calzas?

Y hasta aquí hemos llegado. Have fun!

"El momento de hacer las cosas es cuando tú decides hacerlas"

lunes, 9 de abril de 2012

Shhh...























... El silencio también forma parte de la música, y a mí no me apetece seguir tocando.

"Es mejor permanecer en silencio y que piensen que eres tonto que abrir la boca y confirmar que lo eres"

miércoles, 4 de abril de 2012

Soy...

No me verás si no quiero que lo hagas; sé ocultarme muy bien. Soy un ninja, una sombra que siempre tendrás detrás y cambiará de sitio cuando te des la vuelta, esperando pacientemente el momento propicio para atacar.
Soy paciencia, y puedo esperar horas, días, semanas, meses, años, para no precipitarme. Apagaré mi energía para que no me percibas. Soy energía, y puedo iluminar tus días, quemarte hasta los huesos, elevarte hasta las estrellas.
Soy una estrella; aunque no me veas, siempre estaré ahí, silencioso, como un gato. Soy un gato; ronronearé y te dejaré acariciarme hasta que yo quiera y, cuando menos lo esperes, me marcharé a dormir a otro rincón o te morderé y arañaré de forma salvaje. Soy salvaje, te devoraré hasta saciarme y te quedarás sin aliento, sin respiración, sin aire.
Soy aire; te susurraré al oído las cosas más bellas, oirás las más hermosas melodías, sentirás mis caricias en tu pelo y, cuando me intentes atrapar, me deslizaré entre tus dedos porque nunca podrás agarrarme. Soy el viento caprichoso que vaga por donde quiere...
Todo el mundo busca algo, dice la canción. Pero el viento no busca; encuentra y, cuando lo hace, disfruta de lo que ha encontrado hasta que vuelve a cambiar de dirección.

"Siéntate pacientemente junto al río y verás pasar el cadáver de tu enemigo"


lunes, 19 de marzo de 2012

Misión en ¿solitario?

La nave que llevaba al Capitán a su planeta adoptivo llegó más tarde de lo esperado. El propósito del viaje era una reunión con la misteriosa Dibujante; tres días que llevarían a ambos a realizar las más variadas misiones.

Desde que se conocieron, había quedado muy claro que compartían una cierta conexión que el Capitán no llegaba a comprender del todo. A pesar de los nervios por ser su primera misión en solitario sin su inseparable compañera Muffin, el Capitán estaba emocionado por empezar sus aventuras con Dibujante.

Bastó una mirada para dejar claro que la conexión seguía ahí, incluso más fuerte que antes. Buscaron alimento, recorrieron el planeta investigando guaridas de peligrosos ladrones, consiguieron mágicas melodías y exploraron cavernas subterráneas en busca de fantasmas sin parar de reir.

Después de una noche de descanso, comenzó la más larga y dificultosa misión, para la que contarían con la ayuda de un gran equipo de aliados, encabezados por la pequeña Constructora.

Esta vez, fue más peligroso, ya que se tuvieron que enfrentar a vertiginosas montañas, animales salvajes de llamativos colores y frías cataratas de agua venenosa, en la que el Capitán quedó impregnado.

Para salvarlo, Dibujante se apresuró a llevarlo a su castillo en su aerodeslizador, guiado por una antipática navegante. Una vez allí, tras la desinfección, abrazado por la túnica de Dibujante, el Capitán se sintió a salvo... Pero una hipnótica melodía presagiaba algo que, a pesar de ser esperado y deseado, cogió al Capitán con la guardia baja. Dibujante pasó al ataque mientras el Capitán, en shock, trataba en vano de usar sus mejores técnicas. El entrenamiento fue breve y, sin embargo, intenso. Después de eso, los dos se conocieron algo mejor.

Lo que el Capitán no esperaba es que el entrenamiento con Dibujante amplificara el ruido de su cabeza; un ruido difuso procedente de épocas antiguas, del cual ya le había advertido su aliado, el Sabio Consejero. El cansancio de ambos hizo el resto y ese ruido, se convirtió en un molesto eco que rebotaba una y otra vez en su cerebro. Además, en el fragor del combate había extraviado sus elementos protectores, lo cual hizo muy difícil que el Capitán superara con éxito la última misión a la que se enfrentaría junto a Dibujante y Constructora: la observación del mal absoluto. A pesar de resultar aterradora, los tres unidos lograron vencer una vez más, recuperando también la protección del Capitán, que se sintió un poco más seguro.

Tras despedirse en el hangar, y después de comunicarse con Muffin, el Capitán se dio cuenta que, aunque el eco siguiera rebotando, la conexión existía y, pasara lo que pasara, no se rompería así como así. Mirando la luna menguante mientras el sol amenazaba con asomar, subió a su nave y despegó hacia su planeta de origen sin dejar de preguntarse: ¿Cuál será el próximo capítulo?

"Pedirán perdón los que crean que merecen absolución"

martes, 28 de febrero de 2012

El pájaro bobo

Hoy me apetece hacer una entrada seria, basada en la naturaleza, así que no voy a decir ninguna payasada de las mías... bueno, sólo una (jejeje):
- ¿Con qué se emborrachan los pingüinos?
- Con Licor del Polo.

(Pausa para risas y aplausos... mmm... bueno, como no oigo nada, prosigo... gente más sosa, por Thor... ¬¬)

Total, que yo iba a hablar sobre pingüinos, esas avecillas tan simpáticas. Los pingüinos son unos bichitos fascinantes, con unas costumbres sociales muy curiosas. Por ejemplo, en el caso del pingüino emperador, papá pingüino incuba el huevo mientras que mamá, agotada después de poner, regresa al mar. Después de pasar 115 días sin comer incubando al polluelo, mamá toma el relevo y papá vuelve al mar para alimentarse. Una vez nacido el pequeñín, papá y mamá se turnan para ir en busca de alimento.
Además, forman grupos enormes para protegerse del frío, formando círculos y turnándose en el exterior para que no sean siempre los mismos los que soportan las heladas temperaturas.

Sociables, equitativos y adorables; tanto en directo como en cualquier producto con su forma... Yo me deprimiría si se perdiera uno de mis calcetines de pingüinos por culpa de una lavadora maligna... Pero, aunque sucediera semejante tragedia, seguro que algún pingüino de mi tribu no tardaría ni dos días en devolverme la alegría.

Y, a pesar de todo esto, lo llaman pájaro bobo... Pues yo hoy me siento pingüino, así que puedes llamarme bobo todas las veces que quieras ;)

"No todas las tormentas son malas para el corazón"




miércoles, 8 de febrero de 2012

Hablemos de natación

Hay una cosa que siempre me pregunta mucha gente: "¿Por qué estás tan blanco?"
Mi respuesta puede variar según quién sea el ente preguntante, según mis ganas de cachondeo o según el famoso efecto mariposa; es decir, una mariposa mueve las alas en Papúa, Nueva Guinea, a mí me toca las pelotas que me preguntes por qué estoy tan blanco y te suelto la primera patujada que se me ocurre.
Entre esa amplia variedad de tontuneces que da a luz mi fecundo cerebro, podemos encontrar perlas como estas:
- Porque soy un fantasma.
- Porque sólo voy a la playa de noche y, en vez de tomar el sol, tomo la luna.
- Porque esta mañana desayuné lejía.
- Porque fui al dentista y se pasó blanqueando.
- ¿Y a ti que te importa? ¿Me intereso yo por la razón de que seas tan (añadir lo que sea)?

Pues básicamente, la razón de mi albor es una mezcla de genética y poca afición a la natación.
Sí, es un deporte muy sano y completo, pero me abuuuurre. Además, el agua del Atlántico está fría y eso sí que lo llevo mal. Paso de estar blanco a estar violeta y, a veces, ambas cosas a la vez como un aficionado cualquiera del Real Madrid. Y, a lo mejor, de ahí mismo me viene la poca afición natatoria, ya que un servidor pasó su infancia en Madrid, donde, por mucho que se empeñen, sigue sin haber playas.

Aún así, todos los nadadores del mundo deben agradecerle a los romanos (¿qué han hecho los romanos por nosotros?) que existan las piscinas, donde pueden desarrollar su afición haga frío, calor, sea de noche o de día.En todas partes podemos encontrar piscinas; unas profundas y atemorizantes, otras pequeñas y que invitan al juego y la diversión, y otras, las más fascinantes de todas, que combinan todos esos atributos: empiezan siendo poco hondas y seguras y, según las recorres, se vuelven profundas.

Pero sea cual sea el tipo de piscina, a veces hay que zambullirse y descubrir los placeres y la diversión de algo que, aunque siempre estuvo ahí, nunca empezamos a cogerle el punto.

Y hasta aquí hemos llegado, amiguitos. Voy a tomar un poco el sol y a remojarme los pies ;)

"El amor y la amistad no se piden como el agua; se ofrecen como el té"


viernes, 13 de enero de 2012

Provocación

Mientras estoy sentado te veo frente a mí, mirándome fijamente, pícara y traviesa. Sonrío mientras te devuelvo la mirada; me siento juguetón y sé que tú siempre estás preparada para mí. Me gusta mirarte; eres esbelta, elegante, sexy. Finalmente, me levanto y voy a tu encuentro. Te alzo y te abrazo para atraerte de nuevo a mi reino.

Te sientes cómoda entre mis brazos, sobre mis rodillas, en mi regazo. Paso mis manos por tu cuerpo, sintiendo tus curvas y empiezo a deslizar mis dedos en tus puntos más sensibles. Empiezas a ronronear con cada caricia, con cada pellizco... Gimes, gritas y yo disfruto contigo... Hasta que ambos nos relajamos. Sonrío, y te vuelvo a colocar en tu soporte sabiendo que dentro de un rato me volverás a mirar y querré tocarte de nuevo.

Summer, te quiero... :)

"Sé justo y reconoce que el amor es bello"